Para el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, estos comicios tenían que ser el golpe de gracia. Este lunes, Turquía celebraba elecciones locales tan solo medio año después de las últimas elecciones presidenciales, en las que Erdogan, contra pronóstico, derrotó a la oposición y la sumió en el caos.
Pero este domingo no todo ha sido tan fácil. La oposición turca ha sobrevivido al reto, y con cierta nota: el Partido Republicano del Pueblo (CHP), el principal partido opositor al Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) de Erdogan, ha ganado con margen y mantenido así las tres grandes ciudades del país, Estambul, Ankara e Izmir.
Todos los ojos estaban en Estambul y en el actual alcalde opositor, Ekrem Imamoglu: su victoria era una incógnita, sobre todo por el protagonismo de Erdogan en una campaña personal contra Imamoglu.
Erdogan, hace 30 años, empezó su carrera política a través de la alcaldía de la gran metrópolis turca, de 17 millones de habitantes. Estambul es tan importante para los turcos que, según reza la política de Turquía, quien controla la ciudad controla el país. La ecuación ha fallado esta vez, como también lo hizo en 2019: Erdogan ha perdido su ciudad, Estambul, pero sigue dominando el país hasta, como mínimo, 2028.
Imamoglu ha conseguido, de hecho, el 50% de los votos, con más de diez puntos de ventaja ante el candidato de Erdogan, Murat Kurum, que ha cosechado el 40% de los votos.
La carrera política de Ekrem Imamoglu según los expertos, se lanza ahora aún más. Las miradas están puestas en él, muy popular y famoso en todo el país, para enfrentarse a Erdogan en los siguientes comicios presidenciales de dentro de cuatro años.
“Las elecciones han sido completadas democráticamente, y no hemos tenido ningún percance”, ha dicho Erdogan durante la noche de este domingo: “El pueblo le da un mensaje y avisa a los gobernantes a través de sus votos. Para nosotros, este domingo no es un final, sino un giro. El mensaje ha llegado. Quiero agradecerles a todos nuestros ciudadanos por haber votado en estos comicios, independientemente del partido al que hayan votado”, ha continuado el presidente turco, que ha aceptado veladamente la derrota.