-
A las 17 horas, la tasa de participación se sitúa en un 26,72%, frente al 43,01% registrado en los mismos comicios en 2015
-
En Marsella, donde la extrema derecha es favorita, varios colegios electorales no abrieron por falta de personal para ocuparse de ellos
Este domingo, 47,7 millones de franceses están llamados a participar en las elecciones regionales y departamentales, los últimos comicios antes de las próximas elecciones presidenciales. Sin embargo, como vaticinaban los sondeos, muchos de entre ellos no han acudido a la cita: a las 17h, la tasa de participación se situaba en un 26,72%, frente al 43,01% registrado en los mismos comicios en 2015. Una altísima abstención que podría ser crucial en esta primera vuelta del plebiscito.
La crisis sanitaria y la falta de trascendencia que tendrían a ojos de muchos estas elecciones, explicarían, según una encuesta realizada para France Télévisions, la baja participación. Si bien, con las elecciones presidenciales a la vuelta de la esquina, esta cita con las urnas, destinada a renovar los consejos regionales y departamentales, con competencia en materia de transporte público, educación secundaria, planificación territorial o acción social, es un verdadero test para Emmanuel Macron, cuyo partido cuenta con una ínfima implantación territorial, y, sobre todo, para Marine Le Pen, cuyo partido podría, por primera vez en su historia, hacerse con las riendas de un consejo regional, lo que confirmaría su ascenso y aceptación entre los franceses.
Incidentes en Marsella
La escasa participación también podría explicarse por varios imprevistos, como los registrados en Marsella, capital de la región de Provence-Alpes-Côte d’Azur, donde la extrema derecha es favorita. En la ciudad de la Costa Azul, ciertos colegios electorales no abrieron sus puertas por falta de personal para atenderlos, según el consistorio marsellés, 20 presidentes de los 40 designados para ocuparse de la jornada electoral no acudieron a la convocatoria. “En Marsella la unión de la izquierda [es] más eficaz para condenar al ostracismo a LFI [La Francia Insumisa] que para organizar la democracia: ¡34 colegios electorales cerrados! La vergüenza. ¿Qué valor tiene una elección así?”, lamentó el líder izquierdista Jean-Luc Mélenchon en Twitter.
Al norte del país, en la ciudad de Cousolre, en el departamento de Hauts-de-France, donde la lista macronista incluye a pesos pesados del Gobierno, incluido el ministro de Justicia, Éric Dupond-Moretti, no faltó personal para vigilar los comicios, pero sí papeletas de voto. Hasta el mediodía, sólo se ofreció a los electores las papeletas de seis listas, faltaban así las papeletas de la unión de la izquierda, reunida en torno a la candidatura de Karima Delli.
Noticias relacionadas
Una segunda vuelta decisiva
La jornada electoral continuará hasta las 20h en ciertas regiones. Habrá que esperar hasta entonces para conocer los primeros resultados del escrutinio regido por un sistema de dos vueltas que permite a una lista que consiga más del 50% de los votos ahorrarse la segunda. Si ninguna lista consigue alcanzar dicho umbral, aquellas que alcancen un 10% pueden participar en la decisiva segunda vuelta, por lo que, el próximo domingo 27 de junio, los duelos podrían ser triangulares y cuadrangulares en ciertas regiones.
