Golden State vuelve a la final de la NBA después de tres años. El quinteto de California confirmó la supremacía que ejerció sobre Dallas en toda la serie de la final del Oeste para vencer 120-110 al cuadro de Luka Doncic.
Así lo entendieron desde el comienzo Stephen Curry y compañía. Porque el equipo de Steve Kerr no dio respiro a los Mavericks. En el primer cuarto, logró un parcial de 28-23, mientras que en el segundo sacó una ventaja de doce puntos más para irse al descanso con un parcial de 69-52.
En el inicio del tercero, el cuadro del coach Steve Kerr no bajó la intensidad. Incluso, estuvo en ventaja de 24. Sin embargo, en el final del cuarto, el equipo de Texas pareció reaccionar con un parcial de 15-2, una diferencia que permitió acortar el resultado a una diferencia de sólo nueve puntos.
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Sin embargo, en el epílogo del duelo, el equipo de San Francisco sacó a relucir toda su jerarquía y empató 26-26 el último cuarto con una gran actuación de Klay Thompson, quien sumó 32 puntos. Suficiente para llevarse el partido definitivo por 120-110 y dejar la serie 4-1.
El equipo de Warriors llega a su sexta final en las últimas 10 temporadas, en las cuales ya ganó tres títulos. Su rival saldrá de la final del Este, donde Boston tiene una ventaja de 3-2 sobre Miami y podría cerrar este jueves en Massachusetts, a las 20:30 de Chile.
