A Mónica Carroquino, subdirectora de La Casa Encendida, se le amontonan los buenos momentos que ha vivido en Libros Mutantes. Los recuerda mientras repasa el programa de este año. Una edición especial, centrada en la música, pero que también contará con más de 90 expositores llegados de todo el planeta. “Me interesa mucho ver lo que va a hacer la editorial Audimat, que viene desde Francia y con la que hemos editado un librito”, comenta. La publicación trae contenidos tan estimulantes como un texto sobre ‘trap’ y farmacopea, otro sobre los orígenes del reggaeton o uno dedicado a las pioneras de la música electrónica.
A Audimat, que este viernes presenta una charla dentro de Perspectivas Mutantes, se suman multitud de iniciativas. Desde sesiones de colectivos como los madrileños Dembooty a talleres para realizar un fanzine, con grabación de una casete incluida. Serán tres días, hasta el domingo, donde la institución cultural de la Ronda de Valencia llenará de libros, revistas y publicaciones alternativas el patio, las salas de las diferentes plantas y, si el tiempo lo permite, una terraza más apetecible que nunca.
Festival camuflado de feria
Carroquino intenta tomar distancia rápidamente de lo que se suele entender por una feria. “Siempre quisimos que Libros Mutantes fuese más un festival que una feria comercial, un punto de encuentro anual para todos los amantes de las publicaciones independientes y de aquellas disciplinas artísticas que convergen en el papel, pero que fuera accesible a todas las personas, que pudiera generar interés en otros públicos más allá del especializado”, indica.
Desde La Casa Encendida vienen trabajando desde hace una década con Libros Mutantes para que “la experimentación y la accesibilidad puedan darse en un mismo espacio”. Son diez años en los que este proyecto colectivo, ahora liderado por Ricardo Juárez, que comenzó como una respuesta alternativa a La Noche de los Libros, no ha parado de sumar ideas en los márgenes del mundo editorial.
“Aquellos inicios ya contenían algunas de las propuestas que seguimos teniendo. Es el caso de la edición de un fanzine para llevar, el concurso de los muebles para el patio o las diferentes charlas que se celebran a diario”, resalta Juárez, al que pillamos muy atareado con los preparativos de la feria. “El núcleo duro somos cuatro personas. Luego se van añadiendo a medida que llegan los días de celebración”.
Otro de los implicados es Carlos Primo, editor de Carpe Noctem y colaborador desde los inicios de Libros Mutantes, que destaca de este año la participación de Flee Project. “Lo fascinante de esta editorial, que también publica discos de vinilo, es como se acerca a la música”, resalta Primo, también periodista y agitador del perfume, entre sus innumerables facetas. “No es un caso sin más de transposición de lo musical al formato documental. Tiene que ver con la etnografía sonora. De hecho, ellos cuentan que su último número, el dedicado a los sonidos del Golfo Pérsico, surgió escuchando unas grabaciones de cantos rituales que recordaban a los mantras”. Una indagación que ahonda en una de sus principales facetas: escuchar la música con un contexto, profundizando en su significado y avanzando mucho más allá de sus cualidades estéticas.
Una década sin parar
Un componente que en Libros Mutantes siempre han desarrollado. Carroquino recuerda, por ejemplo, cuando invitaron a Max Schumann, el legendario director de la plataforma Printed Matter Inc y organizador de la New York Art Book Fair, probablemente la feria del sector alternativas más importante del mundo: “Una charla que fue pura erudición y contexto histórico sobre las publicaciones independientes para un público que empezaba a interesarse por ellas”.
Por qué Libros Mutantes, de algún modo, ha sido capaz de crear un público que no tenía su sitio. Que no existía en 2012. Y siempre de la mano de muchos de los presupuestos que han reivindicado como son la música, el medio ambiente, la accesibilidad o la sostenibilidad. “Visto en retrospectiva, la feria ha sido pionera en su programa de música acercando muchos sonidos a Madrid que aún no se escuchaban en los clubes”, recuerda Carroquino, que vibró especialmente con la actuación de Venus X, programada en 2013 por Silvia Bianchi, otra de las figuras fundamentales para entender la evolución de la feria en festival.
Hay que estar preparado no solo para acercarse a contemplar los expositores, sino también adquirir algunas de esas publicaciones
Una feria y un nombre, Libros Mutantes, que va a girar en estos años precedentes por Melbourne, Guadalajara o Los Ángeles. Y que también tendrá invitados destacados internacionales. “Atlas Mex 2015 fue el primer foco internacional que hicimos. Ahí presentamos una sala de lectura con un centenar de publicaciones independientes mexicanas seleccionadas por la comisaria Analía Solomonoff, precedida por La noche de los perros románticos”, continúa explicando Carroquino. Aquella maratón de lecturas y ladridos tuvo a los poetas mexicanos Aleida Belem Salazar, Jesús Carmona-Robles y Martin Rangel y a los españoles Cristian Piné, María Mercromina y Óscar García Sierra. “Aquello fue mágico”.
Cada año hay que estar preparado no solo para acercarse a contemplar los expositores, sino también, si la economía lo permite, adquirir algunas de esas publicaciones que son tendencia y están revolucionando la escena internacional. “Anualmente destino un presupuesto para compras en Libros Mutantes e intento no superarlo, aunque rara vez lo consigo, es muy difícil convivir tres días con tantas propuestas, muchas de ellas muy difíciles de encontrar fuera de este contexto”, confiesa Carroquino, apasionada del papel y coleccionista de este tipo de publicaciones, que muchas veces se convierten en objetos. “Suelo hacer listado de favoritos antes de comprar nada, me dejo aconsejar por las editoriales y por Carlos Primo, del equipo de Mutante, editor audaz con muchos años de feria a sus espaldas”. Entre ellos los ya mencionados Flee Project ya están en su lista. También en la nuestra.
A Mónica Carroquino, subdirectora de La Casa Encendida, se le amontonan los buenos momentos que ha vivido en Libros Mutantes. Los recuerda mientras repasa el programa de este año. Una edición especial, centrada en la música, pero que también contará con más de 90 expositores llegados de todo el planeta. “Me interesa mucho ver lo que va a hacer la editorial Audimat, que viene desde Francia y con la que hemos editado un librito”, comenta. La publicación trae contenidos tan estimulantes como un texto sobre ‘trap’ y farmacopea, otro sobre los orígenes del reggaeton o uno dedicado a las pioneras de la música electrónica.